miércoles, 13 de abril de 2011

Lo mejor no es tratar al amigo sino al enemigo hacerlo amigo.

Frase que inspira a reconsiderar nuestra posición acerca de todos aquellos que consideramos amigos y también a los enemigos.
¿Enemigo? ¿Quién dice que es enemigo o porque lo es acaso alguien ya definió los roles o están establecidos como parte del destino?
La realidad es que no es cierto es una farsa una burla puros embustes, personalmente creo que consideramos enemigo a toda aquella persona que difieren con nuestra filosofía con nuestros pensamientos o más acertadamente es que nos reflejamos en el actuar de esa persona tan detestable para uno mismo.
Sé que muchos dirán que esto es mentira que no tiene nada de credibilidad pero si cada uno de los lectores lo analiza a conciencia podrá darse cuenta que en verdad eso es lo que tanto nos molesta de aquellos enemigos. La frase no invita a conservar a nuestros amigos pero más que nada acercarnos a esos adversarios modificar, tratar o apaciguar esa conducta tan deplorable para poder convivir, teóricamente cuando logremos realizar lo mencionado nos ayudaremos personalmente a mejorar como personas y modificar la conducta o los pensamientos que nos desagradan de los otros cuando en realidad lo que resulta molesto es nuestra propia identidad basada en la vida ajena.
Lo bueno de tener enemigos es que sabremos identificar nuestras fallas y tener una opción para corregirlas.